Pese a que en el mercado de invierno se sepa qué necesita un equipo a la perfección, el margen de error de un fichaje es más alto que en verano. Así lo importante no es cuestionarse quién es, realmente, Darwin Machis sino que puede aportar. Qué puede sumar por condiciones, momentos y estados. De él y del Real Valladolid
¿Quién, es, realmente, Darwin Machis Marcano? Es difícil arrojar más información sobre el atacante venezolano o, lo que es lo mismo, sobre un jugador con 128 partidos en LaLiga Santander, 89 en LaLiga SmartBank y un total de 293 en España. El ex del Granada CF, Sociedad Deportiva Huesca o Cádiz CF no necesita mucha presentación pero sí una importante contextualización. Es relevante saber cómo llega, qué puede buscar en Valladolid y por qué necesita él de su llegada al Estadio José Zorrilla.
A la hora de analizar un jugador llegado en el mercado de invierno es importante cuestionarse cuál sería la sensación que dejaría su llegada en el mercado de verano. ¿Qué pensaría el entorno blanquivioleta de Machis si hubiera llegado a Valladolid en el mes de junio o julio? Inicialmente creo que el enfoque hubiera ido por el de un fichaje similar al de Fabián Orellana en el verano de 2020. En aquel momento, el chileno fue visto como un salto de calidad para los de Sergio González. El Pucela apostaba sobre seguro. El ex de la Sociedad Deportiva Éibar iba a asegurar un rendimiento a corto plazo, como ahora parece confirmar el nuevo ’22’.
Si en verano la sensación hubiera sido de un golpe sobre la mesa; ahora, no. Apostar por un jugador individualista en invierno conlleva un margen de error elevado. El de Machis está en saber qué jugo podrá obtener él de su estancia en el Estadio José Zorrilla. Cerca de los 30 años tiene fútbol para ofrecer pero, a su vez, debe entender bajo qué exigencia y desde qué papel. Unos meses lejos de España le han demostrado que su lugar está en LaLiga y por ello arriesga llegando a un equipo que le ofrece unos contextos favorables pero, a su vez, una paciencia limitada con un perfil como el suyo.
Un estilo que busca regularidad
Inicialmente, el Real Valladolid y Pacheta demandan a un jugador atrevido e individualista. Por estilo y, sobre todo, por el momento de forma y confianza del vestuario. Ambos saben que no hay problema en que él asuma peso y exigencia. Es más, él la quiere y es ahí el posible problema. El descaro que Machis mostró ante el Valencia CF en su primer duelo como blanquivioleta es un arma de doble filo. Ahora el equipo lo necesita. Ahora es bien visto. En unas semanas, quizás, no. Este domingo, Machis estuvo acertado en su descaro. ¿Qué ocurrirá cuando no tenga acierto? Que lo seguirá intentando. Del elogio a la desesperación hay sólo un error. O dos.
«Darwin Machis cumple a la perfección la constante demanda de Pacheta en las últimas semanas de ser vertical y generar llegada al equipo al último tercio del área»
El perfil del venezolano es el de un atacante atrevido y descarado que tiene un importante punto de individualismo. Dicho rasgo se puede entender, tras unos errores, en egoísmo y es ahí dónde está el margen de error de un jugador de grandes condiciones técnicas y físicas. De tren inferior muy potente, el primer fichaje blanquivioleta en este mercado invernal ya ha dejado muestra de cuál es su estilo y de cuánto puede sumar en las próximas semanas. Para saber qué puede aportar, realmente, un fichaje en el mercado de invierno hay que verlo en liza en el equipo en el que ficha y Machis lo ha conseguido en sólo 90 minutos.
Darwin Machis debutaba en un Real Valladolid con cinco derrotas consecutivas en su casillero y rozando los 500 minutos sin hacer gol. Ese contexto define, también, la capacidad de aportar del jugador y Machis aprovechó esa tendencia del equipo para arrojar descaro, verticalidad y atrevimiento. En pocos minutos supo asumir liderazgo y galones. Hubiera sido complicado sorprenderse si él hubiera lanzado un penalti en el duelo. Se veía con confianza y seguro porque el Real Valladolid ahora ofrece algo que él necesita: espacio. En la exigencia de ser «vertical», tal y como pide Pacheta, y en el matiz de llegar y no estar en el último tercio, Machis será determinante. Tendrá ese peso con menos regularidad de la conseguida en su debut, pero con las mismas ideas y objetivos. Seguro.
