En las dos últimas temporadas del Real Valladolid en LaLiga Santander siempre tuve claro que al equipo de Sergio González le hacía falta un extremo zurdo de pierna izquierda. Consideraba, como lo sigo pensando ahora, que los pucelanos hubieran sido un equipo mucho más completo con un jugador que supiera generar amplitud de campo en el perfil izquierdo. Consideraba que el equipo tenía cubierta esa variante con Pablo Hervías en el costado derecho. Ahora, sin el riojano, el Real Valladolid tiene una carencia que José Rojo, Pacheta, quiere cubrir con los laterales.
Desde hace varias semanas se viene hablando en el seno del Estadio José Zorrilla que el Real Valladolid va a ser el mismo. El propio burgalés lo ha confesado en varias ocasiones e, incluso, lo ha demostrado. Su Pucela va a ser el mismo. Juegue en LaLiga SmartBank o en LaLiga Santander y uno de los motivos para conseguirlo va a ser la disposición y la altura que tenga los laterales. El perfil de dichos jugadores en cuestión lo confirmaba, pero los movimientos a los que les invita Pacheta lo ratifican.
En un vídeo de la fase de la pretemporada que el equipo vivió en Los Ángeles de San Rafael se escucha unas indicaciones del burgalés en las que éste habla de la necesidad de hacer el campo ancho. «No es lo mismo jugar en 50 metros que en 64», aseguraba el preparador en una de esas sesiones. Pese a que en muchas ocasiones se busque que activos como Toni Villa, Óscar Plano o Gonzalo Plata reciban en amplitud completa, la suya va a ser una propuesta interior. Para reforzar a dichos jugadores y su estilo, el Pucela demanda a unos laterales profundos. Hablar de laterales de campo contrario es atractivo pero, también, arriesgado y en este riesgo es en el que más y mejor se debe mover el equipo.
Identidad de Pacheta
Arriesgar, sí, pero saber cómo, dónde y cuándo hacerlo. En las respuestas a esas cuestiones están muchas de las credenciales del Real Valladolid en su regreso a la élite. Volver a LaLiga Santander es importante. Para el vestuario y su cuerpo técnico es también una gran oportunidad de demostrar y confirmar la identidad de un grupo con una idea bien asimilada. Para ello se debe entender el peso, la exigencia y el riesgo de los laterales. Este Pucela se define y se quiere definir en mucho por ellos.
La amplitud que estos muestren de inicio es capital para hacer que el Pucela tenga líneas de pase por delante de la altura de balón. La facilidad que, posteriormente, tengan para avanzar aumentará las posibilidades de acumular jugadores en zonas ofensivas. Los equilibrios que consigan tener, aumentará la potencia de dichas llegadas. La calidad de esas participaciones ofensivas generará segundas jugadas y llegadas de segunda línea potentes. En un equipo con mucho jugador interior y con extremos con clara vocación para zonas internas, el Real Valladolid vivirá de sus laterales.
Con ellos tendrá amplitud, ganará verticalidad, llegará al área, será dominador, tendrá propuesta y respuesta y, ante todo, con ellos y por ellos, será el Real Valladolid de Pacheta. El burgalés ha conseguido dotar a los suyos de personalidad desde su llegada al Estadio José Zorrilla. Ésta es atrevida, descarada, ofensiva y protagonista, todo aquello que quiere para sus laterales en un regreso a LaLiga Santander en la que se va a ver a un Pucela directo y ambicioso.
