El fichaje de Gonzalo Plata por el Real Valladolid fue una locura. En todos los sentidos. El ecuatoriano generó una ilusión y emoción en el seno blanquivioleta que no recuerdo. Ningún jugador había generado tanta expectación. Frenada dicha fuerza, llega el momento de analizar el clima y las exigencias creadas. ¿Está preparado Gonzalo Plata para llegar a los techos que se le han impuesto con los análisis de su fichaje? Honestamente, creo que no. El fichaje es buenísimo, pero el enfoque que se ha hecho de él, no.
Se han elevado las expectativas de forma desmesurada. Twitter es un canal que me tiene enamorado pero que, en múltiples ocasiones, exagera la realidad. Repito, Gonzalo Plata es un gran jugador pero, por el momento, es imposible conocer hasta qué nivel puede llegar y cuál será su techo. El del ecuatoriano es un «melón por abrir», como se dice vulgarmente. Gonzalo Plata tiene un potencial descomunal. Ahí las redes sociales no exageran. En la seguridad de que vaya explotar, sí. El ecuatoriano ha demostrado mucho en Valladolid. Bueno y malo. Entre lo negativo está la irregularidad.
En LaLiga SmartBank y en un equipo como el Real Valladolid de la pasada campaña los picos de rendimientos se perdonan. Se llegan a olvidar si todo termina en ascenso. LaLiga Santander es otra exigencia y más tras un desembolso como el que va a tener que realizar el Club por su fichaje. El Pucela ha hipotecado parte de su futuro por un jugador de enorme calidad pero de incierto rendimiento. ¿Qué tal se adaptará a la nueva categoría? ¿Cómo asumirá el entorno pucelano un rendimiento irregular de un jugador que, seguro, tendrá picos elevados de rendimiento? ¿Cuánto se le exigir en relación al desembolso económico? Estas son preguntas relevantes y necesarias.
Irreal
Pese a ellas y su desconocida respuesta, el movimiento es acertado, mucho, pero el futuro a corto plazo es incierto. El Real Valladolid debe ar un salto de categoría muy exigente y Gonzalo Plata, también. Él está capacitado para sumar en la élite del fútbol español, pero lo importante es saber si está preparado para ello. Capacidad no es lo mismo que preparación y más en un jugador ciertamente influenciable y al que le crecen tanto las exigencias y la presión. Por el momento sólo se puede mirar al presente y al impacto de su fichaje. ¿Mirar a una venta futura? Totalmente irreal.