La linterna de Velasco

La linterna de Ángel Velasco, desde el 20 de febrero de 2007 informando y opinando sobre el Real Valladolid

Linternazos

Sergio González recupera, por fin, su mejor herramienta

La derrota (1-0) del Real Valladolid en el Camp Nou fue complicada de digerir. Como he definido en ElDesmarque Valladolid es un final de partido de «mierda» sobre el que hay que leer y desde el que se debe analizar más allá del dolor de la derrota y la impotencia de muchos de los condicionantes que llevaron a ella. El Real Valladolid está tocado por perder como lo hizo ante el Fútbol Club Barcelona pero un equipo maduro y un ambiente concienciado deben mirar sobre el partido y los condicionantes de juego que en él se dieron.

El equipo, en el terreno de juego, estuvo muy bien. Supo proponer, supo crecer y supo responder. Hizo un encuentro más que digno y generó acciones de esperanza, positivismo y evolución. Lo hizo, principalmente, por la propuesta de Sergio González. Si el catalán estuvo superado por Ronald Koeman en el encuentro de diciembre en el Estadio José Zorrilla, en esta ocasión, Sergio estuvo fuerte y consiguió firmar un buen partido, una buena propuesta y una gran dirección gracias, entre otros aspectos, a recuperar una de sus mejores armas.

Siempre he confirmado, y así lo expresé con rotundidad cuando se cumplieron dos años desde su llegada a Zorrilla, que yo he sentido dos versiones de Sergio. Una me gusta y otra no. La primera, la que se vio a su llegada a Valladolid y en sus primeros meses en LaLiga Santander me gustaba. La otra, no. En una veo naturalidad. En la otra, no. Ante el Fútbol Club Barcelona se pudieron ver las dos versiones. Si en la previa vi a un Sergio lleno de tópicos y mensajes en una venta de imagen, éxito y supervivencia innecesaria, tras el duelo y durante el encuentro vi a ese Sergio que me gusta.

Pequeños éxitos
Como afirmé en la tertulia de este martes en Radio Marca Valladolid, el catalán «estuvo de ’10’ en el partido y de ’11’ después». Creo que lo estuvo porque se mostró natural. Sin ataduras ni imposiciones de ideas, esquemas o propuesta, el Real Valladolid creció y rindió porque su entrenador se adapta a las herramientas, a los contextos y a las posibilidades. Ya sea en LaLiga SmartBank o en el Camp Nou, la influencia de Sergio González es más alta en el aspecto positivo si no tiene las ataduras sobre lo creado, pensado o lo conseguido.

Desde la naturalidad que le caracterizo en 2018 para detallar a un equipo debilitado pero con armas muy válidas, el Real Valladolid firmó un gran partido en el Camp Nou. Es cierto que los enfrentamientos ante rivales como el culé son irreales para el Pucela y obligan a lecturas muy concienzudas, pero los blanquivioleta consiguieron muchos de los objetivos que se habían marcado para ese duelo por su propia exigencia, aquélla a la que se llegó desde la naturalidad de Sergio González, la mejor herramienta del catalán.

𝟭𝟵𝟴𝟴. 𝘗𝘦𝘳𝘪𝘰𝘥𝘪𝘴𝘵𝘢 𝘥𝘦𝘱𝘰𝘳𝘵𝘪𝘷𝘰 𝘺 𝘦𝘯𝘵𝘳𝘦𝘯𝘢𝘥𝘰𝘳 𝘜𝘌𝘍𝘈 𝘗𝘙𝘖. Creo que en el fútbol todo tiene el término apropiado y un porqué obligatorio. Por ello, desde 2007 llevo entrenando equipos y escribiendo sobre cómo entiendo este deporte