La linterna de Velasco

La linterna de Ángel Velasco, desde el 20 de febrero de 2007 informando y opinando sobre el Real Valladolid

Reflexiones de fútbol

Las dudas por depender del fútbol y no de los números

Han pasado muchas horas desde que el Real Valladolid empató (1-1) en el Estadio de Ipurúa y mi sensación no ha cambiado en exceso. La opinión con la imagen, la propuesta y la realidad del equipo es mala. El juego blanquivioleta fue pobre y la evolución del equipo en el partido no existió. Los de Sergio González terminaron dando por bueno el empate y la sensación no es para estar «tranquilo», tal y como pedía el entrenador catalán tras el partido. No puedo estar más lejos de la afirmación de Sergio en la rueda de prensa posterior al duelo en la que aseguraba que no se podía estar «contento» pero sí «tranquilo».

Aunque él lo aseguraba porque estaba contento al ver, nuevamente, «competir» al Real Valladolid, las cuentas mostradas por Sergio no cuadran y no porque con seis victorias fuera suficiente, que también, sino por las posibilidades futbolísticas pucelanas de conseguir esas seis victorias. Creo, honestamente, que los blanquivioleta están lejos de ese número porque, actualmente, no tienen los ajustes, las ideas ni las herramientas para conseguirlas. 

Exigencias ofensivas
El primer punto que me lleva a pensar que el Real Valladolid está lejos de ese número de victorias es el factor ofensivo. Pese a que se señale mucho la poca seguridad defensiva de los pucelanos, la realidad de construcción y creación de ocasiones del equipo es lo que limita al Pucela de conseguir lo que Sergio ve básico para conseguir el objetivo. En otras temporadas, con la calculadora junto a la pizarra, el Real Valladolid se ha hecho con los objetivos. Ahora, con mayor exigencia por ganar que en otros momentos, la realidad futbolística me lleva a pensar que el camino y ese «competir» que convence a Sergio es insuficiente.

Con lo mostrado en Éibar, en el que es el mejor partido del equipo en  los últimos 20 días, al equipo no le da para salvarse. Como escribía este domingo en ElDesmarque Valladolid, Sergio tiene las cuentas, pero no los argumentos ni las ideas. Para ganar, el equipo debe estar cerca del área rival y no lo está. Para conseguir más victorias en 15 partidos que las que se han firmado en 23, el equipo debe ofrecer los contextos para los jugadores más ofensivos, y no los tiene. Obviamente, la propuesta pucelana no deja aquellos movimientos e ideas en las que mejor se mueven Fabián Orellana, Roque Mesa o Shon Weissman.

Ganar en LaLiga Santander es complicado y para hacerlo hay que ofrecer mucho, aquéllo que el equipo no consigue tener en las últimas semanas. El equipo no arriesga, el grupo no tiene valentía, el Real Valladolid es previsible y el Pucela contesta muy pocas preguntas de forma positiva e ilusionante. ¿Con lo mostrado en Éibar será suficiente para ganar a Real Madrid o al Celta de Vigo, los próximos rivales? ¿Hay algún jugador que esté, ahora, en el mejor momento de la temporada? ¿Ha crecido el Real Valladolid en su propuesta en las últimas semanas?  ¿Dónde vive el Real Valladolid más fases de los partidos: en su campo o en el rival? ¿Los jugadores que ‘ganan’ partidos muestran sensaciones de confianza y seguridad?

Estas son cinco preguntas que se me ocurren para detectar y calcular cómo está un equipo y en todas ellas el Real Valladolid ofrece dudas. Las ofrece porque aunque Sergio González tenga claras cuántas victorias y puntos necesita para conseguir la salvación, el cómo se va a luchar y jugar por esas victorias y lo cerca que, futbolísticamente, están de llegar hablan de que este equipo no puede estar «tranquilo» y sí muy preocupado porque las dudas son muchas más que las certezas y las seguridades, aquéllas que generan tranquilidad.

𝟭𝟵𝟴𝟴. 𝘗𝘦𝘳𝘪𝘰𝘥𝘪𝘴𝘵𝘢 𝘥𝘦𝘱𝘰𝘳𝘵𝘪𝘷𝘰 𝘺 𝘦𝘯𝘵𝘳𝘦𝘯𝘢𝘥𝘰𝘳 𝘜𝘌𝘍𝘈 𝘗𝘙𝘖. Creo que en el fútbol todo tiene el término apropiado y un porqué obligatorio. Por ello, desde 2007 llevo entrenando equipos y escribiendo sobre cómo entiendo este deporte