La linterna de Velasco

La linterna de Ángel Velasco, desde el 20 de febrero de 2007 informando y opinando sobre el Real Valladolid

En frío

El Real Valladolid no se marchó de vacío de Madrid

«Unas veces se gana y otros se aprende». Ésta es una frase hecha del mundo del fútbol y del deporte que siempre me ha arrojado una importante sensación de perdedor que no me convence, pero de la que se pueden obtener muchas sensaciones. Entendiendo dónde está esa fase de aprendizaje, la frase es buena y lo es en la intención de, por ejemplo, sacar todo lo positivo que la visita del Real Valladolid al Estadio Alfredo Di Stéfano ofrece. Siguiendo en el camino de esa frase inicial, el Real Madrid se fue con los puntos pero el Real Valladolid no se fue de vacío de su visita a Valdebebas.

Dejando a un lado la visión resultadista que se puede hacer del encuentro, los de Sergio González obtuvieron grandes noticias e importantes detalles del encuentro de la cuarta jornada de LaLiga Santander. Contextualizando siempre quién era el rival y cómo de condicionados llegaban los pucelanos al duelo, el partido deja aún más y mejores noticias que se leen desde la buena lectura de las transiciones, la clave para el duelo y, posiblemente, para la temporada pero, también desde nombres propios como Roberto Jiménez, Raúl Carnero o Shon Weissman.

Ellos son la parte positiva de un duelo elocuente para entender el potencial del Real Valladolid y los contextos limitados en los que se deben mover otros jugadores como Bruno González o Míchel Herrero, por ejemplo. Con todo, el principal análisis pasa por entender que los locales se quedaron con la victoria mientras que los visitantes se marcharon con una importante lectura. Jugando lejos del área, las transiciones son más fáciles de realizar. Teniendo un enganche, el equipo combina con mayor rapidez y encuentra con más facilidad ese primer pase tras el robo. Son dos aspectos del juego que muestra la visita pucelana a Madrid, pero sólo dos.

Detallas… de realidad
Parece todo más sencillo porque Sergio se adecua más a las posibilidades reales del equipo. El Real Valladolid es más vertical ya que tiene a más jugadores perfilados hacia portería rival que en las dos temporadas anteriores. Los blanquivioleta muestran mayor facilidad para combinar, en transición o propuesta inicial, porque tiene ese jugador entre líneas que generar superioridad interior. Manteniendo las líneas juntas pero no clavadas en campo propio, los blanquivioleta salieron del Estadio Alfredo Di Stéfano mostrando que Roberto Jiménez ha sacado provecho a la ausencia de Jordi Masip, que Raúl Carnero tiene coletazos para sumar mucho al Pucela, que Fabián Orellana es capital por dentro o que Shon Weissman suma muchos movimientos y posibilidades al ataque.

Sergio González se marchó de la Ciudad Deportiva del Real Madrid sabiendo que tiene muchas opciones para su equipo. Pese a que aún no se ha cerrado el mercado y el Pucela debe detallar varias posiciones determinantes, el duelo ante los blancos confirma todas las opciones de un equipo que, a su vez, ratifica los contextos de rendimiento de Bruno González y Míchel Herrero, entre otros. El Real Valladolid no se marchó de vació de Madrid pero tampoco lo hizo con todo aspectos positivos. La realidad no sólo marca los aciertos, por muchos que sean.

𝟭𝟵𝟴𝟴. 𝘗𝘦𝘳𝘪𝘰𝘥𝘪𝘴𝘵𝘢 𝘥𝘦𝘱𝘰𝘳𝘵𝘪𝘷𝘰 𝘺 𝘦𝘯𝘵𝘳𝘦𝘯𝘢𝘥𝘰𝘳 𝘜𝘌𝘍𝘈 𝘗𝘙𝘖. Creo que en el fútbol todo tiene el término apropiado y un porqué obligatorio. Por ello, desde 2007 llevo entrenando equipos y escribiendo sobre cómo entiendo este deporte