«Enhorabuena, Getafe CF. Os lleváis un gran jugador. Independientemente de la inversión, Enes Ünal es un enorme futbolista, de grandes condiciones y un activo de enorme polivalencia y adaptación a cualquier sistema. Contando con la continuidad de José Bordalás en el Coliseum Alfonso Pérez, los madrileños tienen a un anillo perfecto para el modelo de juego azulón«. Ésta sería para mí la introducción que haría en caso de tener que presentárselo a un aficionado o medio de comunicación del equipo madrileño gracias a lo ofrecido por el jugador en dos años de enorme evolución y gran adaptación en el Real Valladolid.

El Enes Ünal que se ha marchado hace unas semanas del Estadio José Zorrilla no es el mismo que llegó en agosto de 2018. El jugador ha cambiado mucho por aquello que nunca se le ha valorado: su adaptación a las necesidades del equipo y al modelo de Sergio González. Bajo este contexto, yo jamás podré analizar la etapa del turco por los goles. Jamás. Sin poderle mirar ni examinarle por el registro goleador ni, obviamente, por el acierto de cara a puerta por el contexto futbolístico del Pucela, sí me quedo con todo lo que ha ofrecido y que, en gran parte, es aquello que le pedía Sergio.

Aquel jugador de la Eredivisie…
A su llegada a Valladolid yo recordé aquel jugador completo y goleador de la temporada 2016/2017 en el FC Twente. Goles de falta, en el área, fuera de ella, con una pierna, con otra… Recordar a ese jugador de sólo 19 años arrasar en la liga holandesa sin anotar un tanto de penalti me emocionó al verlo firmar en Zorrilla. Su llegada me hacía esperar un gran ‘9’ pero, al final, lo que he visto es un gran jugador. No me puedo quejar. Con un peregrinaje algo largo hacia la demanda de Sergio González en la temporada 2018/2019 y necesitando su cuota de protagonismo, aquélla que le dieron los lanzamientos de penalti, Enes Ünal ha firmado 18 meses finales de su etapa en el Real Valladolid de gran nivel global pese a tener un momento de dudas.

En ese tiempo, Ünal se ha hecho a las exigencias y peticiones pucelanas para ser uno de los jugadores más importantes del equipo. Sabiendo mirar a campo propio, liderando el juego aéreo, equilibrando al equipo y asumiendo parte del juego entre líneas que tanto se ha necesitado en la fase de construcción, Ünal ha hecho casi más de ’10’ que de ‘9’. Por ello elogio el paso del jugador por el Estadio José Zorrilla. Lo hago por el rendimiento ofrecido, la calidad de su presencia, la adaptación a las necesidades y la profesionalidad mostrada.

Con 23 años y teniendo que adaptarse a un juego que no era el que esperaba ni, posiblemente, el que su carrera necesitaba, Enes Ünal se ha marchado de Valladolid sin una mala palabra, sin una mísera filtración pero con una predisposición total por aquéllo que le demandaba el equipo, lo que le costó entender pero que, finalmente, supo hacer  tan bien como golear en Holanda. Ahora en Getafe, con mayor presencia en campo rival, presionando cerca del área contraria y viendo que tiene guardadas las espaldas en la presión veremos si Ünal tiene gol o no lo tiene y si el menosprecio que se hizo a su adaptación fue un error o, simplemente, cuestión del juego de Sergio, aquél que ya no salvan ni las comparaciones con Jaime Mata.