Habitualmente en el fútbol nos quedamos con las últimas experiencias. Bajo ese prisma queda la sensación de que el Real Valladolid de Sergio González ha tenido siempre este estilo tan marcado, pero no. Lo cierto es que esta forma de jugar, tan llevada al extremo en las últimas fechas, ha sido el resultado de una evolución muy marcada por los errores y sufrimientos vividos en la temporada 2018/2019.

Sumergidos en un escenario donde triunfa el juego reactivo y vertical, Sergio ha ido simplificando el fútbol de su equipo para reducir el error. Lo ha enfocado así desde el convencimiento de que su equipo es técnicamente inferior y que ciertos riesgos no le compensan. Desordenar al rival significa también un desorden en tu propio equipo y para el cuerpo técnico pucelano eso se traduce en un contexto negativo y de riesgo. A mayor caos, la calidad se hace más visible y la consecuencia son más opciones de perder. En cada partido se ha tomado el empate como un resultado más que positivo y a partir de esa premisa y con paciencia se ha ido cimentando la permanencia y extremando el estilo.

Mirando los detalles
Con todo y mirando al futuro, el gran reto de Sergio no es buscar otra forma de juego sino perfeccionar ese estilo desde los detalles. Lograr que el equipo pueda robar un poco más arriba, que los centrocampistas se atrevan y que los atacantes sepan elegir mejor, por ejemplo. Esos son tres pequeños frentes a los que debe y puede mirar el Pucela pueden conseguirse mezclando dos ingredientes: acertar con un puñado de incorporaciones y transformar la mentalidad del equipo, siendo éste el más complejo e importante.

Ha sido muy común confundir un mejor partido de ataque con un cambio de estilo, cuando la realidad es que las circunstancias de necesidad, exigencia y presión han marcado los contextos. Por todo ello sigo pensando que el polarizado debate alrededor de este tema está mal enfocado y que el famoso salto de calidad no va condicionado por la forma de juego sino por crecer dentro de ella. Éste es un gran reto y una opción que nos dejará descubrir la permanencia consecutiva firmada por el Real Valladolid.