Lo dije porque lo pienso y lo mantengo: no veo descendiendo al Club Deportivo Leganés. Creo que el equipo pepinero ha sido uno de los grandes beneficiados por el parón y va a ser el que mejor responda en el regreso a la competición. Creo que su entrenador se mueve muy bien en circunstancias exigentes y límite, y los madrileños tienen ese punto positivo que otros conjuntos no van a tener por el perfil de su preparador. Ante la nueva ventana de la competición que se abre es importante mirar al estilo de cada entrenador y valorar el perfil que van a ofrecer o, como poco, el que se les presupone.
Posiblemente, y tras revisar las características de los entrenadores los últimos siete clasificados en LaLiga Santander, el ‘diferente’ sea Óscar García. El preparador del Celta de Vigo da la imagen de una propuesta de juego posicional y una ambición con equipos de cotas altas y ambiciosas aunque sea en competiciones de menos nivel que la española. El exfutbolista tiene un estilo atractivo para ligas como la griega, la austriaca o la israelí, en las que ha entrenado, pero la exigencia a la que se va a enfrentar en las próximas semanas me lleva a pensar que se van a mover mejor entrenadores como Javier Aguirre, por su experiencia, o Vicente Moreno, por la exigencia a la que se ha enfrentado con el RCD Mallorca y que ha sido similar a la actual.
El perfil del valenciano o, incluso, el de Abelardo, que se movió en un momento similar con el Deportivo Alavés, son puntos a favor de sus equipos, que tendrán un plus en las próximas 11 jornadas por detalles de gestión y movilidad que puedan ofrece sus entrenadores. En esa elevada exigencia también está Sergio González. El catalán sabe que éste es el mayor reto de su carrera futbolística. Sabiendo que conseguir un tercer objetivo deportivo con el Real Valladolid le haría histórico en el Estadio José Zorrilla, su momento personal es importante y crucial.
El mejor Sergio posible
En estos próximos 11 partidos se puede conseguir un nuevo éxito y para él, el entrenador pucelano debe recuperar su mejor versión. Para mí, ese estilo ganador de Sergio González se vio a su llegada al Club. Su bagaje en Segunda división fue exitoso porque miró partido a partido y porque contagió al equipo seguridad y ambición. Todos los detalles que no me terminan de convencer de su discurso, su actitud y su propuesta en las dos últimas temporadas me ganaron en sus primeros meses como entrenador pucelano. En ellos tuvo adaptación, liderazgo, carisma y respuestas, todo lo que se necesita para la nueva competición que se inicia desde la próxima semana, y que no tengo duda que darán perfiles como el de Javier Aguirre o José Luis Mendilibar.
Sergio González, con contrato con el Real Valladolid para las dos próximas temporadas, tiene un reto para volver a mostrar su mejor cara y su perfil futbolístico más atractivo
El acierto en la toma de decisiones pero, sobre todo, esa toma decisiones en situaciones de estrés, exigencia, nervios, dudas… prueba la categoría de cualquier entrenador y Sergio González, el entrenador con el que el Real Valladolid tiene un compromiso firmado para las dos próximas temporadas, vivirá un reto mayúsculo para volver a mostrar su mejor cara y su perfil futbolístico más atractivo, aquella que devolvió al Primera división hace casi dos años.