RCD Espanyol 3 -1 Real Valladolid | La línea descendente del equipo no tiene fin
El mal comienzo de partido del Real Valladolid en el, ahora, llamado RCDE Stadium y, sobre todo, la triste y pobre segunda parte condenan al equipo de Sergio González a potenciar todos sus problemas, limitaciones y carencias. Pese a la vuelta al sistema de cinco defensas, el partido estuvo marcado más por la poca fuerza y convicción del equipo en muchas fases del juego que por la esperada y ansiada creencia que se esperaba del equipo blanquivioleta. Con todo, las alarmas se mantienen encendidas en el Estadio José Zorrilla, con todo lo que ello conlleva. Las dudas en jugadores, proyecto y cuerpo técnico aparecen en el entorno pucelano.
· La CRÓNICA de la derrota (3-1) ante el RCD Espanyol, para ElDesmarque Valladolid ·

Sensación de bloqueo
Parece muy difícil poder calificar el momento de la temporada que vive el Real Valladolid porque nada parece sencillo en la actualidad blanquivioleta. El equipo de Sergio González tiene un problema importante de juego, creencia y confianza pero la verdadera carencia está en la solución. Sabiendo que ante el RCD Espanyol la lesión de Fernando Calero fue importante, la realidad habla de que ya basta de excusas. El equipo se desangra y cualquier detalle parece ser la justificación para entender la última derrota.
Carencias en la plantilla, limitaciones presupuestarias, fallos individuales, errores de concentración, persecuciones arbitrales… Cada partido tiene una justificación pero todas parecen pobres e injustificadas. Lo son porque el problema blanquivioleta es futbolístico y la solución, desconocida. ¿Alguien sabe cuál es el principal problema del equipo? Quizás son muchos y, posiblemente, ahora mismo, todo el problema esté en la indefinición que tiene el equipo en sus ideas. Sergio no da con la clave sobre cómo presionar, cómo esperar y cómo contragolpear.
El mercado de fichajes ha sido una complicación para el entrenador. Ésta era la ventana más complicada para Miguel Ángel Gómez y, posiblemente, se haya roto el equilibrio y las ideas del cuerpo técnico. Con todo, la principal duda es saber dónde está el margen de mejora del equipo y dónde se debe centrar el conjunto blanquivioleta para salir de la crisis y la decadencia de juego y sensaciones. Creyendo en el trabajo de Sergio González y en el compromiso del equipo, el miedo es total. Lo es porque con las credenciales más importantes para la profesionalidad, las limitaciones pueden apoderarse del equipo en el momento crucial del año.
Duras preguntas
¿Puede este Pucela haber tocado fondo? ¿Está capacitado el grupo para darle la vuelta a la situación? ¿Está bloqueado el equipo? ¿Y el cuerpo técnico? ¿La confianza en este grupo debe ser inamovible? ¿Es necesario un cambio radical? ¿Y una decisión drástica? Necesitando saber dónde la principal necesidad de mejora futbolístico de este equipo, las preguntas que aparecen tras la racha de resultados y la carencia de juego y puntos hacen temblar a cualquiera que disfrutase y se emocionase el pasado el pasado 16 de junio.