Asumido que el Real Valladolid cerrará un ‘9’, más allá de Stiven Plaza, en este mercado invernal, la cuestión es saber qué modelo de delantero se busca y necesita
El Real Valladolid necesita reforzar su ataque. No es la única zona del campo que debe mejorar Miguel Ángel Gómez pero sí la prioridad para el crecimiento del equipo y todo ello no es precisamente por una debilidad y o una posible falta de calidad de los dos actuales delantero del equipo. Sergio González necesita incorporaciones ofensivas para crecer en las variantes de juego que tiene y crear un equipo más solvente y completo en ataque.
Confirmada esta idea, desde el entorno blanquivioleta se duda de cuál es el perfil y el tipo de jugador que más necesita el equipo. ¿Un jugador referente en cuestión física? ¿Un segundo delantero que amplíe las variantes en las transiciones? ¿Un goleador cueste lo que cueste? ¿Un futbolista consagrado y con amplio bagaje en la categoría? Todas estas cuestiones debaten sobre las necesidades del equipo pucelano y los rasgos que la llegada de éste tendrían o variarían en el Real Valladolid.
El ejemplo de Marc Gual
Después de la última jornada liguera pude leer en Twitter a un periodista que sigue la actualidad del Real Zaragoza sobre las diferencias entre ‘delantero’ y ‘goleador’ y sobre el sencillo análisis que se hace de los jugadores por el número de goles. En el fútbol moderno mirar a un delantero por sus goles es un error, un grave error. Un delantero es mucho más que eso. Jugar con un delantero no conlleva hacerlo con un goleador. Se pueden unir pero no es lo habitual y menos en un Real Valladolid de Primera división.
Por ello, las dudas de saber qué delantero necesita el Real Valladolid para este mercado son importantes. Hablar de un ‘goleador’ conlleva a hacerlo de un jugador que no suma en cuestiones defensivas. Por norma general este jugador está fuera del contexto defensivo para sentirse fresco de cara a puerta rival. ¿Puede y quiere el Real Valladolid trabajar con un jugador menos en tareas defensivas?
Pese a que éste sea al perfil más llamativo para el entorno y la afición puede que no sea el más necesario. Pese a las claras mejorías que necesita el equipo en su modelo de juego, el jugador que llegue al Real Valladolid debe ser el que más se aclimate al equipo y a su estilo. Un jugador que rompa el equilibrio parece descartado por Sergio González y la dirección deportiva, salvo que fuera para tener un rol secundario.
Con todo, el debate no cesa y pese a la cercanía de la llegada de Sergi Guardiola, como se lee en ElDesmarque Valladolid, las dudas sobre si un jugador sin experiencia en la élite y el bagaje de una temporada en Segunda, con su estilo muy definido, es el más acorde a las necesidades. El consenso no llega y nunca se producirá.