Villarreal CF 0 – 1 Real Valladolid | Los pucelanos aumentan sus credenciales
En el fútbol, como en la vida, lo prometido es deuda y Sergio González y el Real Valladolid están cumpliendo con todo lo prometido en las últimas semanas. Los pucelanos aseguraron en varias ocasiones que el equipo cumpliría con sus obligaciones y que llegaría a sus objetivos en el preciso instante en el que se quitara los miedos y las angustias. En Vigo desaparecieron las primeras fobias, sobre todo ofensivas, y en la victoria (2-1) ante el Levante UD, el resto. Así y sólo así se entiende el buen rédito ofrecido por el equipo blanquivioleta en el Estadio de la Cerámica. Más allá del gol de Leo Suárez y de los minutos de insistencia de un proyecto tan poderoso como el amarillo, el Pucela firmó un excelente encuentro para cerrar ocho días de éxito social y deportivo.
· La CRÓNICA de la victoria (0-1) ante el Villarreal CF, para ElDesmarque Valladolid ·
Dormir para ajusticiar
Las cinco bajas con las que los blanquivioleta viajaron hasta Castellón y el poco tiempo de recuperación tras el partido del jueves, con las condicionantes físicos de muchos otros futbolistas, hicieron que Sergio González tuviera muy claro qué partido quería ante el Villarreal CF. Por muy desproporcionado que pudiese parecer, el Real Valladolid iba a pelear, en la propuesta, la posesión al equipo de Javi Calleja. Los pucelanos querían el balón para tener, desde ahí el dominio del partido y, así, restar las opciones de contragolpe del rival.
Ya en la ejecución del plan, con y sin balón, los pucelanos eran un equipo de pocas dimensiones. Así, era difícil poder robarle el balón y contragolpearle. Tenían dominadas muchas de las acciones del juego y, así, consiguió hacer el partido lento y sin grandes ocasiones. En esa exigencia de marcadores cortos que tiene el Pucela para esta temporada, ante el Villarreal CF se confirmaba esa idea.
El Real Valladolid parecía no estar para un encuentro de elevada exigencia. Quería pocas ocasiones pero un máximo acierto. Este segundo rasgo, capital, llegó en las botas de Leo Suárez. El ‘32’, gran protagonista en la previa y en el once titular del Pucela, ajustició a su ex equipo con un gol desde la frontal. El tanto daba calma al juego del Pucela, consistencia a su idea y ansiedad al rival. Con la ventaja, el Pucela comenzó a jugar con el marcador y con el tiempo. Todo corría en su favor. Dormido el partido, el rival parecía no tener fuerzas.
Sorprendente seguridad
Con perspectiva, la tranquilidad que ofreció el equipo tras el tanto y en la más de media hora desde el gol y hasta el final, sólo se vio alterada por la acción que el VAR sancionó con penalti. La ejecución de Gerard Moreno dejó a Jordi Masip como el gran héroe de un partido que da rienda suelta a las alternativas y opciones de un equipo que en ocho días ha sumado siete puntos y que ha despejado tantos miedos como dudas e incertidumbres.
El Pucela está de dulce y lo hace tras cumplir con su primera gran promesa. Sergio y los jugadores prometieron un gran nivel tras el primer gol y los primeros tres puntos y éste nivel y éxito ha llegado. Cuando parecía que el equipo no estaba a la altura y que no tenía nivel para la categoría, tras el inicio de partido en Vigo y los dos goles celestes, el equipo ha cumplido con su promesa, ha crecido en todas las vertientes y ha silenciado las voces críticas, miedosas y exageradas.