Hace meses, Ivi López y Keko Gontán serían incorporaciones imposibles para el Real Valladolid pero sus circunstancias personales facilitan llegadas que busca Gómez
2 de febrero de 2018 | «Un “lujo” que necesita una oportunidad como ésta»
Seré sincero. Miguel Ángel Gómez me está enseñando mucho. Siempre tuve la duda de cuáles son las funciones de un director deportivo y cómo se le puede ‘examinar’. La duda era importante pero el andaluz la está resolviendo en las últimas fechas. Su presencia está siendo determinante para que jugadores imposibles para el Real Valladolid puedan llegar al Estadio José Zorrilla. En situaciones normales, Ivi López o Keko Gontán nunca llegarían al Pucela pero su momento y estado de forma no son los esperados y es ahí donde el Real Valladolid y su director deportivo juegan un papel fundamental.
Por economía, jugadores por los que se han pagado hasta cinco millones son inviables. De igual forma, talentos como Javier Ontiveros, también. Hablar del marbellí es hacerlo de una situación similar a la de los dos primeros fichajes de este verano. El jugador del Málaga CF es un perfil que, por calidad y fútbol, es inviable en un Pucela de Segunda pero como el pasado invierno su situación no era la normal, Miguel Ángel Gómez se puso a su disposición. Quería ‘recuperarle’ y creía que de blanquivioleta se daban todos los condicionantes para hacerlo.
El Real Valladolid era una oportunidad para el jugador de volver al camino que una vez tuvo y que le hizo ser una sensación en España. Esa opción, ahora, es la de Keko e Ivi, pero deseando que el resultado final sea mejor. Miguel Ángel Gómez quiso recuperar a Javier Ontiveros y aprovecharse de esa oportunidad que le dejaba el mercado pero no consiguió sus objetivos al 100%. Algún detalle faltó.
Efecto de maduración
Ahora, la apuesta por los dos atacantes madrileños es importante pero se espera que el éxito sea más duradero de lo que lo fue el de Javier Ontiveros. El último ’10’ del Real Valladolid aportó mucho a su llegada. Fue una bocanada de aire freso para ambos. Para Club y jugador. Miguel Ángel Gómez le cuidaba, le potenciaba y Luis César Sampedro, inicialmente, y Sergio González, después, le ponían en el once titular. Todo hasta una lesión.
Sin poder viajar al Estadio Carlos Tartiere, Ontiveros perdió su puesto y el jugador se perdió para la causa. Le faltó consistencia y fuerza en su cambio. Pese a después que llegó a participar en tres de los partidos del play-off de ascenso, su rendimiento ya fue mucho más débil que en la primeras semanas.
Pese a ello, Ontiveros ha vuelto ya al Estadio de La Rosaleda y lo ha hecho con un aire renovado. Valladolid, el Estadio José Zorrilla y la apuesta de Miguel Ángel Gómez por recuperarle le han ayudado a ver el fútbol de otra manera. En muchas ocasiones la recuperación de un jugador pasa por la madurez de éste. Ontiveros lo hizo y ha progresado en su carrera. Ahora llega el momento de que ese punto de madurez y evolución que necesitan Keko e Ivi llegue pronto. Por su bien, por su carrera y por el éxito inmediato del Real Valladolid, el segundo gran beneficiado si su recuperación se produce de una forma inmediata.
