La linterna de Velasco

La linterna de Ángel Velasco, desde el 20 de febrero de 2007 informando y opinando sobre el Real Valladolid

Las voces del Pucela

El propio Sampedro sabe que no puede continuar

La rueda de prensa previa a la visita del Rayo Vallecano al Estadio José Zorrilla en la temporada 2017/2018 va a marcar un antes y un después. Sin exageraciones. Lo vivido este viernes en la sala de prensa blanquivioleta supera todos los límites de la sinceridad y el análisis en frío de una temporada. Luis César Sampedro ha contado toda su verdad sobre lo que ha vivido un equipo inestable en el campo pero, también, fuera de él. Sin “estabilidad y unión”, como él pide, el gallego afirma que está «curado de espanto» en una comparecencia más propia de la despedida de un entrenador destituido que la de la previa a un partido.

Histórica comparecencia
Me encanta ver ruedas de prensa de entrenador. Creo que la mejor forma para entender el fútbol que quiere un preparador y, por supuesto, aquel que pasa por su cabeza es ver cómo se expresa. Semanalmente veo muchas ruedas de prensa. Quique Sánchez Flores, José Luis Mendilibar, Paco Herrera, Pablo Machín, Paco Jémez… Últimamente me he aficionado hasta de las de Clarence Seedorf. Sus números con el Deportivo de la Coruña son desastrosos pero la exposición de lo que quiere, brillante.

Con todas ellas en la memoria, estoy convencido de que este viernes he visto una de las comparecencias más sorprendentes de los últimos meses, sino la mayor de toda la temporada y no sólo me refiero al Real Valladolid. Luis César Sampedro ha firmado este viernes su final en el Real Valladolid. No hay duda de que el entrenador gallego se ve destituido en el club. Esa sensación de “sentenciado” la nota desde hace semanas y, ahora, tras los últimos acontecimientos, ha expresado todo lo que siente.

Con el claro aroma a una comparecencia de entrenador destituido, más que la de la previa de un duelo importante, Luis César ha mostrado lo experimentado que está. Después de 415 partidos en Segunda división y más de 550 a nivel profesional, y con más derrotas que victorias en su hoja de presentación, el gallego sabe que el fútbol no acaba en Valladolid ni en lo que se haya hecho en el club blanquivioleta. Busca su vida más allá.

Ésta ha sido su mejor oportunidad, el mismo así lo confesó en su presentación, pero no está fluyendo como él esperaba. Seguro que se han producido situaciones que él no ha entendido y que cree que han desestabilizado su trabajo. Por ello ha querido exponerlas. Se ha querido justificar, quizás demasiado, para explicar que no el entrenador que muestra la tabla. De la misma forma que Juan Ignacio Martínez no es el preparador que estuvo en Valladolid, Miroslav Djukic no es tan bueno como dicen los resultados de su etapa pucelana.

La primera sensación que ha mostrado Luis César este viernes es de dolor. Parece mostrar un enfado por el poco valor que se saca a su trabajo, que no a sus resultados, y se ha defendido sacando las uñas. Ha querido dejar claro que el blanquivioleta no es un banquillo nada sencillo. Éste devora el currículum y te coloca en la picota semana tras semana. Parece que él se esperaba otro caminar y se ha visto sorprendido por los vaivenes.

Inevitable salida
La oferta de renovación y el ambiente de destitución poco después sorprendieron al gallego. Posiblemente fueron los cambios pero, sobre todo, su comunicación. Según él, el Club le ofrece la renovación pero no le comunica la posible destitución en la previa a la visita del Lorca FC. Para él, todo cambió por un pequeño puñado de resultados. Carlos Suárez, el gran señalado por él, elogió al míster en su presentación. “Hablamos de fútbol y aprendí cosas”, llegó a asegurar tras firmar al gallego pero todo cambió bruscamente.

Ese camino continuó a los pocos meses pero tras el primer traspié gordo, todo se fue al garete. Desconfianza, descontrol, nervios y filtración de las sensaciones. Luis César se sintió desprotegido y, ahora, sabiendo las negociaciones con otros entrenadores, su experiencia de “35 años” en el fútbol profesional le ha hecho ser sincero y contar su verdad antes de vivir lo que ya es inevitable: su salida del Real Valladolid.

𝟭𝟵𝟴𝟴. 𝘗𝘦𝘳𝘪𝘰𝘥𝘪𝘴𝘵𝘢 𝘥𝘦𝘱𝘰𝘳𝘵𝘪𝘷𝘰 𝘺 𝘦𝘯𝘵𝘳𝘦𝘯𝘢𝘥𝘰𝘳 𝘜𝘌𝘍𝘈 𝘗𝘙𝘖. Creo que en el fútbol todo tiene el término apropiado y un porqué obligatorio. Por ello, desde 2007 llevo entrenando equipos y escribiendo sobre cómo entiendo este deporte