Tras volver a los terrenos de juego, Óscar González se sinceraba en rueda de prensa

Hace pocos días, Nikos Karampelas, el último en llegar al estadio José Zorrilla, ejercía de líder al analizar la realidad del Real Valladolid como nadie lo había hecho hasta la fecha. El griego desmenuzaba la situación del equipo como quería escucharla cualquier aficionado del equipo blanquivioleta. La sinceridad del ex del Levante era altísima, como ha sido la de Óscar González tras su regreso a los terrenos de juego después de 50 días. Recuperado de su lesión y sin esconder que su temporada ha sido «malísima», el ’10’ del Real Valladolid ha reconocido todos y cada uno de los problemas del equipo. Aquellos puntos señalados por el entorno durante toda la temporada eran reconocidos por un jugador de peso del equipo. Si ahora existen críticas a las palabras y en la sinceridad del charro, hay un trasfondo.

[quote style=»2″] Nos ha faltado fútbol durante todo el año. Realmente no hemos tenido de nada. [/quote]

Sinceridad
A principios del mes de octubre y en la semana previa a visitar a la Sociedad Deportiva Huesca en El Alcoraz, Óscar González hacía saltar las alarmas del entorno del Real Valladolid. Calificaba el play-off como un objetivo “bueno” porque “con una plantilla completamente nueva no sabes realmente cuál es tu objetivo”. Las palabras fueron mal asumidas por el entono pucelano. Podía parece que el discurso de ‘10’, uno de los jugadores de más peso del equipo, era poco ambicioso y no se le perdonaba.

“El tiempo lo demostrará”, parecía decir el jugador en un argumento que se ha sostenido con el paso del tiempo. El cambio tan brutal que tuvo el equipo el pasado verano ha dejado al club sin un ambicioso objetivo en el tramo final. La realidad es que el Pucela cuando ha peleado por una ilusión, ésta ha sido el play-off y nunca el ascenso directo. Ahora, cuando la pelea por salvar la categoría y no caer hasta Segunda división B está más fuerte que nunca es importante recordar las palabras del jugador antes de criticar este nuevo rédito de sinceridad que ha ejercido el mediapunta del equipo de Alberto López.

Óscar González ha vuelto a mostrar su maldita sinceridad y realismo en una rueda de prensa en la que ha argumentado todas y cada una de las ideas que se han leído y escuchado en los diferentes puntos del mundo que gira sobre el club durante toda la temporada. La mala planificación, el excesivo número de cedidos o el poco compromiso del vestuario ante la mala situación no son puntos descubiertos por el ‘10’ en su última rueda de prensa. Todos ellos ya flotaban sobre el estadio José Zorrilla desde hace varias semanas.

Duro análisis
Después de un resumen realista de cómo fue el partido ante el Deportivo Alavés y de lo merecida que fue la victoria para el equipo de Pepe Bordalás, Óscar comenzaba, tras las preguntas, a analizar la situación pucelana. Sin saber explicar qué le pasa al equipo, el objetivo lo tiene claro. “Tenemos que mirar a los puestos de abajo y esperar que los rivales no sumen y sumar nosotros lo antes posible”. Discurso muy duro del ‘10’ pero tan complicado de digerir como realista. Si había sinceridad en estas palabras no las escondía tampoco en el análisis futbolístico que necesita la triste situación del equipo..

“Nos ha faltado fútbol todo el año”, decía en una afirmación en que sentenciaba que “realmente no hemos tenido nada” y que tal problema “se debe en parte a los jugadores y a todos los cuerpos técnicos que hemos tenido”. Para él, el problema principal está en el equipo. El vestuario debe cambiar porque “si no cambiamos, puede venir Mourinho o Guardiola que no cambiará nada”.

Sin una metamorfosis en el equipo, que por el momento parece imposible, para Óscar “es normal que haya pesimismo y que se diga que este equipo baja”. La realidad es una pero el equipo debe luchar por evitarla. “En nuestro foro interno sabemos que estamos capacitados para ganar esos dos partidos que necesitamos”, explicaba el ‘10’ ante una situación en la que “sabemos lo que nos jugamos”. Conscientes de la realidad, Óscar no escondía que “el compromiso es difícil”. Es verdad que “todo el mundo quiere y todo el mundo está comprometido pero la realidad es diferente” porque “hay gente que quiere más”. Con un vestuario ‘roto’ por los resultados el equipo tiene que sumar dos victorias, seis puntos para cerrar la temporada y tras los que “los de arriba” deberán decir qué hacer de cara a la próxima temporada.

En ella puede estar o no Óscar, aún no se sabe, como el mismo reconocía, pero esa maldita sinceridad que muestra en todas sus comparecencias es vital para el crecimiento de cualquier equipo. Si no sigue, que la deje en el estadio. Que venda uno de sus talentos porque como dice Álvaro Arbeloa: “mi respeto y admiración para todos aquellos que prefieren causar molestias diciendo la verdad antes que admiración contando mentiras”. Pues eso, respeto y admiración, una vez más, por ‘Mágico’.