Rodri Ríos, todo pundonor, trabajo y constancia en el juego, no da con el camino que espera cualquier delantero: el del gol. No encuentra la fortuna sobre la portería rival

¿Por qué es Rodri Ríos ‘el personaje’ del partido ante el Albacete Balompié?

• Rodri, con tres ocasiones claras en el encuentro, se marchó del Carlos Belmonte sin conseguir anotar un gol.
• El delantero soriano, todo empuje, fuerza e intención lleva sin marcar un gol desde el duelo ante el Mirandés.
• Partidos como éste, obligan a Braulio Vázquez a mirar el mercado de invierno en la búsqueda de un nuevo ‘9’.

Rodri Ríos es uno de esos delanteros que se lo deja todo sobre el terreno de juego. Es un ‘9’ que no necesita el gol para triunfar en sus virtudes. Como todos quiere marcar pero no es evaluado por ello o, al menos, no debe serlo. El futbolista soriano lleva casi a los dos meses sin marcar un gol. No ve puerta desde el debut de Miguel Ángel Portugal el 25 de octubre. Muchas jornadas, muchos minutos y muchas semanas sin ver puerta. En Albacete, pese a generar juego ofensivo, grandes ocasiones y pelearse con todos los rivales por generar huecos para sus compañeros, el acierto goleador estuvo, nuevamente, roto. Con encuentros como el firmado ante el equipo manchego se entiende que Braulio Vázquez esté rebuscando en el mercado para firmar un delantero que llegué en los inicios del próximo mes.

La fortuna no le sonríe
Era de esperar. Tras dos partidos en los que Diego Rubio había disfrutado de la titularidad pero en los que no había conseguido mejorar los registros goleadores ni de ocasions de Rodri Ríos, el delantero soriano regresaba al once titular. Lo hacía como delantero centro y cerca estuvo de adelantar a los pucelanos por dos veces. La primera, la mala fortuna le privaría de hacerlo. El despeje de Juan Carlos se paseaba por la línea de meta hasta llegar al saque de esquina. Después, en ese córner, marcaba su cuarto tanto de la temporada, pero el colegiado lo anulaba.

Una supuesta falta previa de Marcelo Silva evitaba el tanto del soriano para comenzar mandando sobre el partido. Definitivamente, la fortuna no sonríe al ‘9’ que vio cómo su tanto no subía al marcador pese a las explicaciones de todo el equipo blanquivioleta. El detalle que pudo cambiar el partido y, quién sabe si también la dinámica del futbolista, marcaría al jugador que en el resto del partido no vería con claridad la portería de Juan Carlos ni golpearía con suficiente sus acciones.

Antes del gol de Juan Villar, Rodri volvió a ser protagonista, como lo sería en la segunda parte cuando tuvo la sentencia del partido. En el minuto 58 pudo matar el partido. Su disparo salía cruzado y el equipo se llevaba las manos a la cabeza. Resulta increíble la mala fortuna de cara a puerta del ex del Almería o Real Zaragoza. Tres ocasiones claras de cara a puerta y la racha sin gol que empezó el 25 de octubre, sigue pesándole. Tres acciones trabajados por él, labradas por su estilo pero que no le sonrieron. Cuestión de confianza. Cuestión de rachas. Cuestión del kétchup, que diría Ruud van Nistelrooy. A veces no salen y, después, salen todos juntos.

El ejemplo de Óscar Díaz
Horas antes de que Rodri Ríos viviera esas tres ocasiones en Albacete, un ex reciente del Real Valladolid anotaba su séptimo gol de la temporada. Óscar Díaz, delantero sin gol en su campaña en el estadio José Zorrilla, firmaba el empate del Numancia en La Romareda. Saliendo desde el banquillo, el madrileño anotaba su segundo tanto consecutivo. Con él se acerca a la decena y supera con creces las estadísticas firmadas la temporada pasada en Valladolid donde sólo anotó dos goles.

Esos dígitos pucelanos ya son superados por Rodri. Él ya firma tres goles pero lleva ya 49 días sin ver puerta. Desde el debut de Miguel Ángel Portugal en la victoria (2-1) ante el Mirandés, el soriano no marca. No lo consigue pese a que su trabajo es encomiable, su pelea es incansable y su insistencia no conoce límites. Por ello, y por los movimientos brillantes que Portugal vio en él durante el partido, la confianza en él no baja. El club cree en él, Portugal confía en su juego y todos espera que esa confianza y racha que llevan a que el rebote vaya fuera, como en su caso en Albacete, o dentro, como en el de Óscar Díaz en La Romareda, llegue con él en el Real Valladolid y no con la historia blanquivioleta ya en su pasado.