Diego Rubio fue, nuevamente, superado por otras opciones en el ataque. El chileno afronta una semana en la que podría ser titular en Lugo por la sanción de Rodri
• Con Erick Moreno lesionado, Diego Rubio es, supuestamente, el único acompañante que tiene Rodri para el ataque blanquivioleta. Pese a ello, suma solamente 122 minutos repartidos en siete encuentros ligueros •
En los dos últimos partidos del Real Valladolid en el estadio José Zorrilla, Diego Rubio ha sido, con diferencia, el jugador más afectado del vestuario blanquivioleta. Al dolor que genera obtener sólo un punto de seis posibles como local, las visitas del Leganés y de Osasuna han sido dos mazazos para el delantero chileno. Ante los madrileños el ex de Colo Colo vio como un canterano saltaba al terreno de juego antes que él y ante los navarros presenció como un jugador de segunda línea sustituía a Rodri antes que él. Viendo que José y Alejandro Alfaro han contado para Miguel Ángel Portugal más que él en dos encuentros importantes, el ‘19’ blanquivioleta afronta la semana previa a visitar Lugo con el miedo de verse un partido más fuerza. Un tercer golpe, casi consecutivo, sería definitivo para su moral y sus opciones de golear tanto como desea.
122 tristes minutos
Con Erick Moreno lesionado, Diego Rubio es el único delantero profesional que tiene el Pucela junto Rodri Ríos. Sabiendo tal dato sorprende en exceso que el chileno haya disputado solamente 122 minutos ligueros. Con ninguna titularidad hasta la fecha en el primero de sus cuatro años firmados, Rubio afronta la previa de la jornada 15 como una opción de vivir la oportunidad que espera pero también como una posible sentencia final. Jugar o no jugar en Lugo puede ser determinante para él. Un nuevo mazazo tras los dos sufridos en los dos últimos partidos en Zorrilla sentenciaría sus opciones, incluso, le podría colocar en la puerta de salida de cara al mercado invernal.
Tal opción es casi imposible pero ante una situación límite que se comenzaría a dar en Lugo, la situación del chileno en las oficinas pucelanas variaría. Actualmente, la apuesta del club por él es la misma que en verano cuando se le hizo un contrato de larga duración que el club no suele hacer por las dificultades económicas que provoca. Tal firma demuestra que la dirección deportiva confía mucho en él. Con ese convencimiento, y como contaba Arturo Alvarado en ‘Directo Marca Valladolid’, Miguel Ángel Portugal ha recibido lo que podría ser denominado como un toque sobre la situación del jugador. La mayor apuesta del segundo proyecto de Braulio Vázquez en Valladolid está siendo ya no irrelevante como Guzmán Casaseca, sino residual. En muy pocas de sus participaciones el convencimiento sobre su éxito ha planeado sobre el Pucela. La confianza sobre su juego es limitado pero todo podría variar en Lugo. Podría cambiar en el ámbito positivo o sentenciar, en el ámbito más negativo.
Un partido. Nada más
En el fútbol moderno parece que todo debe ser ejecutado en pocas fechas y lo que no se ha conseguido en dos meses, debe realizarse, más tarde, en dos semanas o, incluso, en una. No debería ser así pero la capacidad para devorar que tiene el fútbol y el entorno es tan alta que Diego Rubio deberá demostrar en Galicia todo aquello que no ha tenido la opción de exponer desde su llegada a finales de agosto.
Desde su presentación y hasta la fecha, 122 minutos ligueros disputados. Poco tiempo para verse el potencial del jugador. Ahora si es titular en Lugo serán 90 supuestos minutos en los que el delantero deberá demostrar si está al nivel de trabajo de Rodri, si supera las cifras anotadoras del soriano, si el esfuerzo veraniego del Pucela era necesario e, incluso, si Braulio Vázquez debe acudir al mercado invernal para reforzar el ataque.
EL DATO. Sólo Erick Moreno y Bruno Varela han disputado menos minutos ligueros que el chileno
En total, demasiadas exigencias para un jugador sin ritmo de competición y con un estado anímico muy débil. Pese a que la confianza del club es muy alta en él y que el entorno ha visualizado condiciones en su juego, el chileno viajará a Lugo para disputar un partido. Nada más. Desconocedor de si será titular o no, el ‘19’ del Real Valladolid podrá tener en el Anxo Carro esa oportunidad soñada pero solamente la primera titularidad de una unión con el Pucela que se deberá alargar hasta el año 2019. En aquel momento se podrán tomar decisiones y analizar rendimientos. Tras Lugo, no.