¿Quién es, realmente, Manu del Moral Fernández?
Manu del Moral, experimentado jugador de élite e internacional, llega a Valladolid para las dos próximas temporadas. El jienense acompañó a Garitano en el Éibar
• Manu del Moral fue internacional absoluto en el 2011: «El techo de Manu del Moral estuvo en la selección»
• El jienense llega al Pucela tras una innegable caída: «El innegable declive del fútbol de Manu del Moral»
• El ex de SD Éibar, o Getafe es polivalente en ataque: «Experiencia, alternativas y gol en la segunda línea»
Desde hace varias semanas se lleva hablando en el entorno del Real Valladolid que el equipo necesita refuerzos. La plantilla de Gaizka Garitano necesita fichajes pero no de relleno, le urgen jugadores de contrastado nivel que lleguen al estadio José Zorrilla para ser titulares. El actual Pucela necesita calidad y gol. En estas dos peticiones se ha estado moviendo Braulio Vázquez en las últimas semanas hasta dar con Manuel Del Moral Fernández (Jaén, 25/02/1984), que firma para las dos próximas temporadas con la entidad blanquivioleta.
Este experimentado y polivalente jugador de ataque llega al Real Valladolid tras firmar diez temporadas completas en Primera división. Llegando a cotas altísimas como su fichaje por el Sevilla y la llamada de Del Bosque para debutar con la selección absoluta, el jienense ha firmado temporadas mucho más discretas en las últimas fechas. Tras dos aventuras humildes en dos equipos recién ascendidos como Elche o Éibar, este canterano del Atlético de Madrid repite historia con Gaizka Garitano en un paso atrás en su carrera que busca relanzarse hasta niveles de confianza como los adquiridos en el Getafe.
Jienense rojiblanco
La historia futbolística de Manu del Moral se inicia cuando con 13 años hace las maletas en Jaén para llegar al Atlético de Madrid. Tentado en su sueño de ser profesional del fútbol, emprende una nueva vida fuera de su casa y de sus familiares. Como a todos estos jugadores, el inicio no es fácil. Sufre para conseguir un sueño que año tras año pudo ir viendo más cerca. Compartiendo vestuario e instituto con otros compañeros como Fernando Torres, el fútbol estaba presente en el día a día del nuevo jugador del Real Valladolid.
• «Experiencia, alternativas y gol en la segunda línea», su perfil futbolístico completo •
La evolución de jienense no se frenaba. Potencial desde niño que se confirmaba en edades complicadas como cadetes y juveniles. Con este crecimiento y con solamente 18 años, Del Moral ya tenía un hueco en el equipo filial del Atlético de Madrid en Segunda B. Compartiendo vestuario con los ex pucelanos Lledó y Toche, entre otros, disputó 50 partidos en una campaña y media.
En enero de 2004 se confirmaba su cesión al Recreativo de Huelva en lo que se valoraba como un paso más en su carrera. Un salto a Segunda división de 18 meses en los que disputaría 36 partidos para anotar cuatro goles. Sin demasiado éxito pero con el estreno en la categoría de plata en la cartera, Manu Del moral viviría su debut en el primer equipo rojiblanco la siguiente temporada. Como jugador del filial pero entrenando asiduamente con Carlos Bianchi y Pepe Murcia, fue el entrenador argentino en una derrota en Pamplona el que la daría la opción de estrenarse en la élite. Tras aquel duelo, cuatro partidos más, dos de ellos de titular para cerrar definitivamente su temporada de formación y crecimiento hasta llegar a la élite.
El éxito azulón
Después de pasar en poco más de dos años de jugador del filial a debutar con el primer equipo rojiblanco, mediante una cesión de 18 meses a Huelva, Manu del Moral vio que en el Vicente Calderón no iba a tener hueco. Por ello decidió aceptar la propuesta que el Getafe de Schuster le realizaba. En el momento de firmar por el conjunto azulón, el nuevo jugador blanquivioleta no esperaba tener el éxito que tuvo en el Colisuem. Cinco temporadas, casi 200 partidos y 39 goles que le hicieron ser uno de los jugadores más deseados y valorados de la liga española.
• «El techo de Manu del Moral estuvo en la selección», su época de gran éxito •
Su polivalencia en ataque, su prodigiosa conducción, sus constantes desmarques en el último cuarto y su gran golpeo de balón le hacían el jugador más peligroso de la mejor etapa de la historia del Getafe. Líder incombustible del equipo, fue básico para el entrenador alemán, para Laudrup, para Víctor Muñoz y para Michel. Cinco campañas, cuatro entrenadores, cifras de gran jugador pero, sobre todo, sensaciones de un jugador diferente en un estado de forma único. Tales eran esas impresiones que el Sevilla cerraba su fichaje pocos días antes de que Vicente Del Bosque le citara con la selección español para debutar con la selección absoluta. Internacional sub 19 y sub 20, en junio de 2011 viajó a Venezuela para sustituir a Andrés Iniesta en un partido en el que disputó 45 minutos.
Sevilla, la selección y su bajón
Tras aquel debut soñado, Manu del Moral firmaría su temporada más goleadora. 10 goles ligueros en el Sánchez Pizjuán en 34 partidos demostraban que el futbolista mantenía ese altísimo nivel que le había llevado a la selección. Inicialmente con Marcelino pero, después, con Michel, el nuevo jugador del Real Valladolid explotaba todas sus cualidades desde el costado zurdo. Con compañeros como Álvaro Negredo o Kanouté, su puesto estaba en la segunda línea, posición desde la que mejor se desenvuelve.
Ese doble éxito que fue llegar a las cotas que llegó y, después, poder mantener esa exigencia sólo fue durante un año. En su segunda temporadas en el Pizjuán ni Michel ni Unai Emery confiaron en él. De esta forma, un año después fue cedido al Elche. Con participación pero poco éxito de cara a puerta vivió su préstamo en el Martínez Valero y su última temporada en la élite antes de llegar al Real Valladolid.
• «El innegable declive del fútbol de Manu del Moral», sus últimas campañas •
3.000 minutos de juego en dos temporadas para anotar solamente cinco goles dejan al nuevo fichaje del Real Valladolid en mal lugar. Su declive parece claro pero su punto de inicio en la caída era altísimo. Es obvio, por números y sensaciones, que Manu del Moral no es el de hace cuatro o cinco años pero es lógico. Aquel jugador era un futbolista internacional absoluto y por el que el Sevilla abonó en 2011 casi cinco millones de euros. Cuatro años de aquello, llega al Real Valladolid. Éste es un tiempo muy pequeño para que un jugador de este nivel no sea válido para este nuevo proyecto pucelano en Segunda división.