Zakarya Bergdich abandona el Real Valladolid tras una triste primera temporada. El marroquí llegó como lateral y, con sus problemas, tuvo que reconvertirse al extremo
• Desde el inicio, Juan Ignacio Martínez detectaba que Bergdich no estaba para jugar como lateral en España.
• El lateral marroquí demostraría grandes cualidades físicas y técnicas pero muchísimas deficiencias tácticas.
• Su primera campaña en el Real Valladolid terminó con la cifra de 1.693 minutos disputados en 24 encuentros.
Hay datos que, con el paso del tiempo, demuestran por qué un equipo ha tenido un resultado y por qué otro. Por ejemplo, ver, con perspectiva, que Sisinio González sólo jugó cinco partidos en la temporada 2009/2010 y que Álvaro Rubio no jugó un solo minuto desde la jornada 20 explican el descenso de aquella temporada. La ausencia de estos dos jugadores ejemplifica muchas de las carencias de aquel Pucela casi de igual manera que el hecho de que Zakarya Bergdich fuera un futbolista importante durante la temporada 2013/2014, aquella en la que el equipo entrenador por Juan Ignacio Martínez acabó perdiendo la categoría.
El lateral marroquí, que se presentaba con unas soberbias condiciones técnicas y, sobre todo, físicas dejaba claro en muchas fases de la temporada que es actualmente un jugador por hacer y que necesita tiempo para pulir detalles tácticos importantes, para así poder rendir al nivel de una categoría como la española. Desgraciadamente, el Real Valladolid no tuvo muchas opciones durante la temporada pasada y se tuvo que basar en él en algunos partidos y en diversos planteamientos. Con las carencias del club, que iban mucho más allá del ex del R.C. Lens, y las propias del futbolista, el resultado es la pérdida de categoría. El descenso marca al club, al futbolista y a la vinculación de ambos que se separa tras sólo 18 meses de los tres años que el futbolista firmó.
De lateral a extremo
Esas grandes condiciones físicas unidas a las carencias tácticas hicieron que Juan Ignacio se viera obligado a darle libertad y a alejarlo del área. Con todo ello, Zakarya Bergdich pasó a ser extremo, dejando atrás las opciones que le hacían competidor con Carlos Peña por el puesto de ‘3’. Unos metros más adelantado de su posición, se vio a un jugador aprovechable. El derroche físico que hacía en todos sus comparecencias ilusionaba ante una mejora de un jugador que defensivamente nunca creció y que hizo de la anarquía su principal baza y de la irregularidad su freno.
[pullquote align=»right»] La breve etapa pucelana de Bergdich. Léela ¡AQUÍ! [/pullquote]
Viviendo al límite y al borde de la navaja, Bergdich consiguió acoplarse a algunos planteamientos del completo cuerpo técnico de Juan Ignacio Martínez. En partidos como ante el Fútbol Club Barcelona o Real Madrid, en los que el Pucela era actor secundario y el contragolpe era el arma principal, el marroquí aportó velocidad, derroche y potencia. Dejando fuera las enormes lagunas tácticas y la anarquía que le han persiguieron durante su primera temporada en España, el futbolista era aprovechable. Con muchos más puntos negativos que positivos en su primer año en Valladolid, el jugador tuvo que pelear mucho para ganarse el respeto a comienzos de la presente campaña. Su buen inicio catapultó su valor en el club pero, tristemente, todo lo volvió a perder en los últimos meses. Por todo ello, año y medio después de su llegad, su salida resulta la mejor decisión para todos.