El nuevo entrenador del Real Valladolid consiguió pasar de desconocido a muy valorado en sólo una temporada. Rubí lleva la firma del mejor Girona de la historia

• Con 71 puntos, el Girona fue cuarto clasificado y consiguió llegar hasta la final del play-off por el ascenso.
• Rubi consiguió hacer de su Girona un equipo goleador (78 goles) y un equipo solvente en defensa (62 goles).
• Tras eliminar al Alcorcón, la mejor temporada de la historia del Girona la cerró la U.D. Almería con su ascenso.

Cuando el 18 de agosto de 2012 el Girona salía al estadio de Montilivi con el once formado por Dani Mallo en la portería, José Martínez, Migue González, Chus Herrero y David García en defensa; junto a Juanlu Hens y Marcos Tébar en el doble pivote; dejando a Toni Moral, Garmendia y Jandro en la media punta y a Benja como referencia, nadie pensaba que el Girona estaba comenzando la mejor temporada de su historia. Más aún cuando los de Rubi empataban (0-0) ante el Sabadell.

Tras aquel empate inicial todo cambió y el equipo comenzó con una dinámica brillante para caminar hacia una temporada que fue histórica. Con una goleada (1-5) en Guadalajara y otra victoria (1-0) ante la Ponferradina el camino se allanaba y el futuro del club catalán pintaba bonito pese a que nadie podría imaginar que lo haría hasta las cotas a las que llegaría un equipo con el único objetivo de salvar la categoría e intentar sufrir menos que en la temporada anterior donde el equipo vivió tres cambios de entrenador.

“Se nos ha ido de las manos”
El caminar del Girona era seguro y muy fiable. Con dos derrotas en las primeras catorce jornadas, Rubi y los suyos veían los puestos de descenso muy lejos. La presión del objetivo estaba lejos y los gerundenses habían conseguido formar un buen colchón para un posible bajón. Tal fue el buen inicio catalán que en la jornada 15, cuando el Elche visitó Montilivi, una victoria del equipo catalán le haría líder en solitario. Finalmente, los de Escribá se impusieron (0-1) y el Girona tuvo que bajar los brazos por primera vez en la temporada junto a su afición.

[quote style=»3″] Se nos ha ido de las manos. Firmábamos la permanencia y la Primera está a lo lejos.
Rubi en una entrevista concedida a Marca en mayo de 2013. [/quote]

Pese a la derrota ante los ilicitanos, el Girona tenía el expediente cumplido con creces ya que habían puesto mucha tierra de por medio ante un posible bajón de resultados. Esa mala racha de juego llegó en el mes de enero pero nunca dejó al Girona sin su sueño. El buen bagaje conseguido de puntos ya había provocado una dinámica tan buena que el equipo nunca abandonaría los puestos de play-off, que alternaría con jornadas en las que dormía en puestos de ascenso directo. La realidad es que desde la segunda jornada, Rubi tuvo al equipo en los puestos altos, en un claro ejemplo de que “se nos ha ido de las manos la temporada”, como él propio entrenador decía en una entrevista a Marca a final de campaña.

En esa entrevista, el nuevo entrenador del Real Valladolid aseguraba que “firmaba la permanencia”. El objetivo del equipo era humilde pero más allá de la jornada 28, cuando el equipo consiguió una cifra que ya no le haría bajar, el sueño comenzó a tomar fuerza.

Sueño (casi) cumplido
Poco a poco la historia del Girona 2012/2013 cambiaba. De la permanencia se pasaba a la tranquilidad y de ésta al sueño hasta llegar a vivir el play-off como una obligación en las últimas semanas. Tal fue la campaña que el equipo certificó su pase a la lucha por el ascenso una jornada antes del final de temporada. El broche de la liga regular no cambió nada. El empate ante el Real Madrid Castilla dejaba al Girona como cuarto clasificado y al Alcorcón como rival para las semifinales del ascenso con ida en Madrid y la vuelta en Girona.

[pullquote align=»right»] El presupuesto del Girona de la temporada 12/13 era de 3,9 millones de €, 45% más bajo que un año antes. [/pullquote]

En el primer duelo, el Girona debía hacer bueno el tanto de Moisés Hurtado. La vuelta, gracias, entre otros aspectos, al resultado favorable de la ida, fue placentera. El tempranero gol de Acuña dejaba el pase casi sentenciado hasta que Juanlu Hens finiquitaba la prolongación del sueño que sólo tenía al Almería como rival. Los de Javi Gracia no dieron opción y con un global de 4-0 ascendieron a Primera y dejaron lo vivido por el Girona como un sueño irrepetible que forjaba una historia.

Rozar la Primera división y que ésta sólo se escapara en la última eliminatoria no hace que la plantilla dirigida por Rubi sea la mejor de la historia del Girona, sino que el entrenador y todos los jugadores pucelanos sean eternos dentro de un club humilde, con pasado reciente en Tercera, pero con más de 80 años de historia.