El Pucela regresa a una categoría que no conoce historia y en la que los equipos recién descendidos, lejos de ser favoritos, son los que más temen por su futuro
Hace sólo un año, el Real Zaragoza vivía una situación idéntica a la que vive actualmente el Real Valladolid. Un proyecto ilusionante terminaba en Segunda división y el club zaragocista no sabía qué hacer como ahora puede que no lo sepa el club blanquivioleta. Tras ese momento, el club maño decidió apostar por Paco Herrera. Los aragoneses firmaban, por dos temporadas, a un entrenador con más de 300 partidos en la categoría de plata del fútbol español. Es decir, el Real Zaragoza se hacía con un preparador que conocía a la perfección el mundo en el que se iba a mover, una categoría y unas circunstancias que, finalmente, pudieron con él.
Tras una mala temporada, en la jornada 30, el entrenador catalán dejaba de ser entrenador zaragocista para dejar paso a Víctor Muñoz. Pese a que el ex del Numancia o Celta de Vigo, entre otros equipos, no había conseguido llevar al Real Zaragoza a los objetivos marcados, dejó bien claro su conocimiento de la categoría en una rueda de prensa magistral el 31 de agosto. En la tercera jornada, y tras perder ante el filial del Fútbol Club Barcelona, Paco Herrera hablaba de qué es la Segunda división, ahora llamada Liga adelante, y todos los problemas que supone para un club recién descendido. En aquel mes de agosto el Real Zaragoza estaba en esa situación. Ahora lo está el Real Valladolid y los once minutos de su exposición del catalán son vitales para conocer la cruda realidad a la que debe volver el club pucelano.
Una exposición brillante
Cuando un equipo desciende, todo el mundo comienza a pensar cuándo volverá a la élite pero la realidad es muy diferente. Mucho más cruel. La categoría de plata del fútbol español es muy exigente y en la que se necesita mucho tiempo. En esta rueda de prensa de Paco Herrera lo decía. “Nos está costando mucho pero a nosotros igual que al Mallorca o al Deportivo”. Cuesta porque, pese a que suene duro, “los equipos que llevan cinco o seis años en la categoría están, ahora mismo, mucho mejor armados que nosotros. Están más hechos y están mejor estructurados”, afirmaba el técnico catalán.
[quote style=»3″] Los equipos que llevan cinco o seis años en la categoría están mucho mejor armados.
Paco Herrera sobre lo equipos recién descendidos a Segunda división [/quote]
Bajo su experimentado prisma, un recién descendido es “un proyecto nuevo y una idea nueva”, algo que en ese momento le estaba “costando mucho” asentar a él y que, tristemente, no consiguió hacer. El camino estaba siendo costoso porque, en ese momento, necesitaba “más tiempo”. Herrera pedía más jornadas y más paciencia para que se pudiera ver “por lo menos, un equipo completo”.
Los motivos
Ante su gran exposición y su enseñanza de qué es esta categoría en la sala de prensa del Mini Stadi de Barcelona, la pregunta era obligatoria. ¿Qué tiene esta categoría que la hace tan difícil para un recién descendido? Para Paco Herrera, y siempre tras perder la categoría, los equipos se tienen que “deshacer de todo». Por ejemplo, hace unos meses, «los tres equipos han tenido la obligación de bajar sus presupuestos y es tanta la exigencia que te debes desprender de todo”. Paco Herrera centraba en éste “el gran problema” porque, poco después, con una nueva plantilla, “no es fácil volver a juntarlo todo”.
En definitiva. En la enseñanza de Paco Herrera sobre la categoría a la que, desgraciadamente, regresa el Real Valladolid lo más importante y el mejor ejemplo es que todos los equipos deben “pasar por el desierto y organizarse un poco más” porque sin una construcción de Segunda división es imposible competir en ella. Así, éste es el este punto es donde debe comenzar a fraguarse el crecimiento y el asentamiento del Real Valladolid como club. Las experiencias son recientes y los ejemplos multitudinarios con algo en común. Toda la historia dictamina que sin acoplarse a la categoría, nadie sale vivo de ella.