Con un gol de Tote el Real Valladolid sellaba virtualmente la permanencia en la temporada 2001/2002 en un partido muy poco vistoso y de escaso fútbol
Hay ocasiones, aunque suene muy radical decirlo, en el que el fin sí que justifica los medios. Durante los 90 minutos se puede jugar mal, muy mal, pero todo eso se olvida si el delantero estrella de tu equipo se viste de gala y sella virtualmente la permanencia con una gran jugada y una sublime definición. Esto es lo que le pasó al Real Valladolid la última vez que logró vencer a Club Atlético Osasuna en el estadio José Zorrilla, hace ya más de diez años.
Por aquellos entonces los de Pepe Moré tenían la permanencia a tiro a falta de cuatro jornadas. Pese a las posibilidades del éxito un despiste ante el cuadro rojillo podría encender las alarmas en la ciudad del Pisuerga. De esta forma, y con algo de miedo y recelo, los blanquivioletas salieron al terreno de juego con la intención de no perder y los navarros poco más o menos igual. Los rojillos, entrenados por Miguel Ángel Lotina, se preocuparon únicamente por mantener su portería a cero. Con esos argumentos el partido fue un auténtico sopor hasta que Jorge López Marco, más conociddo como Tote, fue asistido por Fernando Sales a los 20 minutos del segundo tiempo para hacer el único tanto del partido. El madrileño controló el balón, dribló a Juan Carlos Unzué y, casi sin ángulo, alojó el balón dentro de la red visitante. La acción, llena de calidad, conseguía poner por delante a un Pucela que quedaba muy cerca de una permanencia muy bien trabajada día a día y con un equipo con nombres de la calidad de Turu Flores, Cuauhtemoc Blanco, Harold Lozano o Eusebio Sacristán pero que no consiguieron rendir a su nivel.
Volviendo al recuerdo de la última derrota navarra en el estadio José Zorrilla, en los últimos compases del partido el Real Valladolid replegó filas para intentar salir al contragolpe ante un Club Atlético Osasuna que buscaba el empate pero que apenas llegó a generar ocasiones reales de peligro.
Esta vez, y tras más de diez años, se espera que los de Juan Ignacio Martínez consigan doblegar de nuevo a los de Pamplona y así conseguir dos objetivos. El primero no sería otro que romper esa mala racha de las últimas temporadas con los pamplonicas. El segundo sería continuar escalando posiciones en la presente temporada y mejorando el juego de un equipo que va a más.
Alineación blanquivioleta: Ricardo López; Torres Gómez, Gaspar Gálvez, Juan Manuel Peña, Alberto Marcos; Fernando Sales, Jesús Sánchez (Pablo Javier Richetti, m. 61), José Luis Pérez Caminero, Luis García (Chema Jiménez, m. 79); Fernando Fernández y Jorge López ‘Tote’ (Harold Lozano, m. 87)