Fausto Rossi, polivalente atacante italiano, llega por fin al Pucela, para completar la plantilla blanquivioleta. Llega cedido por la Juventus con una opción de compra
Durante el pasado mes de enero, Miroslav Djukic necesitaba fichajes. El serbio solicitaba al club la llegada de un extremo y un mediocentro para así, poder reforzar la plantilla de cara al tramo más complicado de la temporada. El técnico serbio no se fíaba de la gran renta con los puestos de descenso y buscaba cubrir puestos importantes del equipo antes del cierre del mercado invernal. El club lo intentó pero sólo pudo cerrar el costado con el fichaje de Valdet Rama. El centro del campo se quedó sin la llegada del objetivo que se marcó el club, Fausto Rossi (Turín, 03/12/1990). Eso sí, el Pucela guardó el nombre del italiano y, sólo unos meses después, se ha hecho con el futbolista cedido y guardando una opción de compra. El ex jugador del Brescia llega al Real Valladolid para completar varios puestos. Pese a que Rossi ha actuado en banda y escorado a la izquierda, llega para convertirse en el ansiado centrocampista de vocación ofensiva.
“Nos gusta por su polivalencia”, serán algunas de las palabras que se use Juan Ignacio Martínez para presentar al nuevo jugador pero, en este caso, no es así, realmente. La polivalencia de Rossi gusta pero no por posiciones de juego y sí por condiciones. El nuevo jugador del Real Valladolid no es un futbolista que destaca excesivamente por poder jugar en varias posiciones. Puede hacerlo, sí, pero perdiendo enteros. Fausto Rossi no rinde de igual forma en el centro del campo que escorado a una banda. Pese a ello, desde bien pequeño ha demostrado cualidades para explotar por su gran recorrido, su potente disparo y su velocidad. Estas cualidades las sabe complementar a la perfección y le convierten en un futbolista moldeable en su juego. Rossi es capaz de enfundarse el traje de gala y combinar con exquisitez a la vez que está capacitado para luchar y bregar en el terreno de juego. Parafraseando y extrapolando al fútbol italiano, Fausto Rossi tiene condiciones de realizar un fútbol del estilo ‘Pirlo’ con la garra y lucha del fútbol ‘Gatusso’.
Comienzos en casa
Pirlo y Gattuso fueron una pareja inolvidable en Italia. El nuevo jugador del Real Valladolid iba para ser parte de un dúo único en la Juventus. Giovinco y Rossi, Rossi y Giovinco. En el seno del club turinés siempre se había visto a ambos jugadores como el futuro del equipo por cualidades y por ser de la casa y de la ciudad de Turín. Ambos, desde bien pequeñitos, destacaban en las categorías inferiores de la Vecchia Signora y se esperaba que en algún momento dieran el salto al primer equipo. Giovinco lo dio y, hoy por hoy, es uno de los emblemas más importantes de la Juventus. Por el contrario, Fausto Rossi no consiguió dar ese salto. Pese a realizar cuatro pretemporadas con el primer equipo, ésta incluída, nunca ha consiguido quedarse en el último escalón.
En 2008 y con sólo 17 años, Rossi deslumbró a muchos aficionados del Calcio con una pretemporada de alto nivel. Junto a una Juventus de nombres tan importantes como Nedved, Del Piero o Amauri, y entrenados por Claudio Ranieri, el joven futbolista dejó detalles para tener en cuenta pero que el entrenador italiano sólo los uso para completar convocatorias. El poco convencimiento que desde el cuerpo técnico de la ‘Juve’ se tuvo para dar la oportunidad al nuevo jugador del Real Valladolid tiene mención especial en una importante lesión. En una de las fechas en las que Rossi tenía que dar un golpe sobre la mesa, sufrió una lesión de los tendones de la pierna derecha. Ahí, se perdieron bastantes de las opciones de ver a Rossi defendiendo la camiseta de la Juventus como lo hizo en este Trofeo Birra Moretti de 2008.
Copropiedad con el Vicenza
Recuperado de esa grave lesión, la Juventus y el propio futbolista consideraron que la mejor opción era una salida y la búsqueda de minutos en un club de Serie B. Así, y a través de una copropiedad al 50% con el Vicenza, Fausto Rossi debutaba en el fútbol profesional al estrenarse en octubre de 2010 en la categoría de plata del futbol italiano.
Aquella temporada no fue del todo proclive para el futbolista. 16 partidos, 13 encuntros ligueros y tres coperos, para anotar sólo un gol. En los pocos más de 1.000 minutos que disputó en la temporada 2010/2011 no mostró la regularidad que se esperaba de él. La actuación discreta en algunos momentos de la campaña llegaba a desesperar a una afición que vivía encandilada por su calidad y que esperaba que durante la siguiente temporada el salto fuese mayor y Rossi pudiera ayudar a crecer al equipo.
Inicialmente todo fue mucho mejor en el segundo año en Vicenza. Tanto fue así que la Juventus decidió comprar el 50% de los derechos que no le pertenecían del jugador para que éste diera un paso mayor en su carrera en las filas del Brescia. El equipo turinés buscaba un cambio de objetivo en el futbolista. De competir por no descender a luchar por ascender.
Año y medio en el Brescia
En pocos días a Rossi le cambió el objetivo y lo hizo a través de diferentes viajes. Salió de Vicenza para regresar a Turín por la compra de sus derechos. Permaneció en su equipo escasos días hasta que se concreto su cesión al Brescia. Allí, el objetivo grupal era diferente pero el individual no cambiaba. Rossi buscaba seguir creciendo y disfrutando de minutos para poder cumplir su sueño, jugar en la Juventus y que ésta le lleve a la selección absoluta italiana.
En ese tiempo de crecimiento en el Brescia y antes de emigrar a España, Fausto Rossi ha disputado 47 partidos y ha anotado tres goles. En esta última época se ha visto un mejor futbolista con mayor libertad de juego y que ha ofrecido opciones para sus compañeros. Rossi ha vivido un curso intensivo en el Brescia pero ahora le toca una parte muy importante de su carrera: aprobar un Erasmus en España en un equipo con un fútbol que se asemeja a sus características futbolísticas y un entenador que seguro que le dará la oportunidad de aprobar.