El Real Valladolid se ha hecho con Humberto Osorio, un delantero que es “sutil, elegante, implacable y generoso”, según le define la web argentina ‘Pasión Deportiva’. El delantero colombiano posee un gran cartel en el país sudamericano gracias a sus 11 goles con San Martín y su histórico triplete ante Boca Juniors.
Por nacionalidad y estilo, son muchos los que le comparan con Radamel Falcao. Él quiere evitar las comparaciones. “Que digan que mi juego se parece al de Falcao, es relativo. Lo que sí tengo claro es que hay que atacar los balones, lograr ese contacto y seguir así, en este camino”, afirmaba al llegar a Argentina. La intención de ir con tranquilidad no le quita las ganas de ser similar al actual delantero del Mónaco. “Falcao está en un nivel mundial y yo todavía no, por lo menos de momento”, afirmaba en mayo de 2012 a Vanguardia.com cuando el Oporto se interesó por su fichaje.
Admirado en su país
Pese a la tomentosa salida que vivió de Millonarios Fútbol Club para marcharse a Argentina, en su país se siente gran admiración por él. Sus goles en los diferentes equipos locales que ha defendido le colocan junto a estrellas colombianas como el mencionado Falcao o James Rodríguez. Desde el ámbito del aficionado es querido, desde el profesional respetado. Richard Páez, director técnico de Millonarios afirma que “Osorio es un delantero centro con jerarquía y un goleador de raza”.
Esas cualidades las ha ido forjando desde las categorías inferiores de América de Cali, club que le adora y que le recuerda con mucho cariño. Alberto Suárez, ex director técnico de las divisiones inferiores del club, recuerda que el deportista nunca dio problemas. “Por encima de ser un buen jugador, es un ser humano y con él nunca hubo problemas de indisciplina, de él nunca se ha escuchado que sea un tipo díscolo o que tome licor”, aseguraba Suárez.
Un orgulloso padre
Osorio llega a España cumpliendo su sueño y el de su padre, su mejor representante. Luis Osorio no ahorra en calificativos para su vástago. “Yo siento que él tiene un juego muy parecido al de Falcao. Es rápido en el área, se mueve con jerarquía, defiende, ataca. No es de esos que mete goles con pelotazos o patea a la ‘loca’. Sin demeritar a otros, mi hijo patea con estilo, con rapidez, con precisión”.
Con esta descripción era difícil no llegar a Europa, como soñaba su padre. Es cierto que él quería ver a Humberto en “Madrid o Barcelona” pero la llegada al Real Valladolid le contenta igual. El salto a Europa ha llegado y todo gracias a que su familia lo dio todo para que Humberto fuera profesional del fútbol.